La discriminación por razón de lengua es de la misma categoría que la de género, etnia u orientación sexual, afirman Vicenta Tasa y Anselm Bodoque - Política Lingüística

Con la presencia del director general, Rubén Trenzano, se presentó en la Biblioteca Central de Gandia el libro Consum, comerç i llengües. Polítiques públiques i jurisprudència referencial, de la colección Ninyoles

El estudio de los profesores de la Universitat de València Vicenta Tasa y Anselm Bodoque sobre las políticas públicas que se siguen en el fomento del valenciano en el ámbito comercial y en las relaciones socioeconómicas se hizo el 2018 y, desde entonces, la Administración Valenciana ha tomado medidas y ha legislado para defender los derechos lingüísticos de la ciudadanía, pero todavía hay mucho que hacer, sobre todo en el ámbito de la industria y el comercio, dijo la experta en derecho constitucional Vicenta Tasa. Los autores consideran que la regulación legislativa estatal tiene que permitir garantizar los derechos de todas las lenguas que conviven en el Estado y que, por lo tanto, se tiene que romper el techo de cristal que genera el sistema de derechos lingüísticos basado en la jerarquización de las lenguas, en el que el castellano siempre queda por encima.

Entre una serie de medidas, Tasa y Bodoque proponen acciones de cooperación con los comercios, empezando por aquellos que tengan una mayor sensibilidad hacia el valenciano, pero aseguran que, por encima del compromiso político de los gobiernos y más allá de las normativas jurídicas, hace falta que la ciudadanía empuje y asuma que la discriminación por razón de lengua tiene la misma categoría que la de género, etnia u orientación sexual. Bodoque, doctor en ciencia política, y Tasa insistieron en que a las empresas privadas que tienen una dimensión pública, bien porque reciben subvenciones o bien porque contratan con la Administración pública para ofrecer servicios públicos, se les tiene que exigir que garanticen los derechos de los clientes.

En el coloquio posterior con el público se sugirió la creación de un sello de calidad de buenas prácticas lingüísticas y se insistió en la importancia de la educación, la formación de los trabajadores y trabajadoras del comercio y una política distributiva estratégicamente mejor diseñada.

La presentación del acto estuvo a cargo del periodista, editor y docente Juli Capilla, que valoró positivamente las propuestas de los autores de cara a la promoción del uso del valenciano en los ámbitos donde tiene menos presencia.